Muchas cosas pueden provocar dolor articular crónico, pero es importante recordar que el dolor es la forma en que su cuerpo envía un mensaje; en este caso, es que su cuerpo necesita ayuda. Si bien puede eliminar el dolor con medicamentos, pero para ayudar realmente a su cuerpo, debe identificar la causa raíz del dolor y luego aplicar el método correcto para deshacerse de él.

Si alguna parte de la articulación se ve comprometida, ya sea por trauma, lesión o inflamación, experimentará dolor. El dolor en las articulaciones se ha vuelto más común con la edad, ya que los años de tensión física afectan principalmente al hombro, los codos, las caderas y las muñecas.

Puede practicar estas simples medidas de precaución para garantizar un estilo de vida sin dolor.

  1. Comience con lo básico evaluando su patrón de ejercicio, lesiones, cama e incluso su estación de trabajo.
  2. Lleve un registro de su dolor manteniendo un diario, lo que ayudará a identificar patrones recurrentes.
  3. Evalúe sus niveles de estrés y, en consecuencia, considere actividades para aliviar el estrés: ejercicio ligero, yoga y meditación.
  4. Si el dolor es persistente, puedes optar por alguna terapia avanzada con imanes. La terapia magnética es eficaz para controlar el dolor artrítico. Las 'envolturas magnéticas' atadas por encima de la rótula han demostrado reducir la hinchazón artrítica y el ablandamiento de la inflamación de las articulaciones.
  5. La deshidratación ha sido una de las causas subyacentes del dolor articular. El consumo de agua magnetizada tiene un efecto positivo para aliviar el dolor articular.
  6. La mala postura, a lo largo del tiempo, afecta nuestras articulaciones. La fatiga, la mala posición para dormir, sentarse frente a la computadora en el trabajo durante largos períodos de tiempo y los viajes extensos tienen un efecto adverso en su postura. Los estiramientos ligeros durante el transcurso del día pueden ayudar a mantener una buena postura, lo que también ayudará a minimizar el dolor de espalda y el dolor muscular.
  7. Usar zapatos de tacón alto y mal ajustados con frecuencia debilita la alineación del cuerpo, y finalmente ejerce presión sobre las articulaciones. Opte por plantillas de zapatos / talones y plantillas de gel; no solo absorben los golpes sino que también evitan que el tobillo ruede.
  8. Después de la menopausia, las mujeres sufren una pérdida ósea gradual. Esto se puede controlar consumiendo agua mineralizada de forma regular. El calcio es particularmente importante ya que es uno de los principales componentes para mantener los huesos fuertes y saludables. El agua magnetizada contiene minerales esenciales como hierro, calcio y magnesio que son cruciales para mantener la densidad ósea y prevenir la osteoporosis.
  9. Consumir una dieta sana que consista en minerales y proteínas esenciales hará que los huesos estén sanos y fuertes. Evite los alimentos ricos en carbohidratos y ácidos grasos, como alimentos fritos y procesados, azúcar y productos lácteos, ya que estos alimentos pueden contribuir a la inflamación de las articulaciones.
  10. Masajear ligeramente las rodillas y los hombros con aceite de oliva puede ayudar significativamente a aliviar el dolor y las inflamaciones en las articulaciones. Mientras masajeas la articulación, la dirección de tus golpes debe ser hacia el corazón. Sin embargo, si siente que el dolor es inusual y está causando dificultades extremas en su vida diaria, consulte a un médico.

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